Los clientes de este precioso ático buscaban privacidad. Se creó un bonito y efectivo sistema de lamas verticales de madera y un frondoso ajardinamiento en jardineras perimetrales y árboles en maceteros de barro de gran tamaño que consiguieron dar intimidad a las diferentes terrazas de la vivienda sin restarle luminosidad. La vegetación se disfruta desde cualquier rincón de la casa. Proyecto en colaboración con The Room Studio.