El proyecto de la terraza Jacinto Benavente incluye la espectacular transformación de una azotea de 45 m² en un rincón multifuncional de disfrute y relax. El desafío inicial radicaba en el acceso indirecto desde el rellano comunitario, lo que impulsó la necesidad de maximizar los servicios de esta azotea. La joven pareja propietaria encargó la tarea con el objetivo de disfrutar del espacio con amigos y destacó la importancia de que tuviera un mínimo mantenimiento. Adicionalmente, buscaban un oasis de tranquilidad que les permitiera tomar un descanso de la vida urbana.
Se ideó un diseño integral que contemplase los tres usos esenciales de una terraza: una zona de comedor, un área de chill-out y un solárium. La fusión de la zona de comedor y chill-out bajo una única pérgola de alistonado buscaba proteger ambas áreas del sol, garantizando comodidad y funcionalidad.
Para privatizar el espacio y aprovechar las vistas panorámicas de Barcelona, se optó por una valla de madera sintética alistonada. En uno de los lados, se diseñó una cocina completa con fregadero, nevera y plancha barbacoa, integrándose armoniosamente con la valla de madera. La vegetación perimetral, cuidadosamente seleccionada, no supera los 120/130 cm permitiendo así mantener las vistas.
Los materiales seleccionados juegan un papel crucial en la estética y el mantenimiento mínimo. La tarima de madera sintética, la pérgola de hierro con cubierta de madera de teca, y la cocina con piedra Zimbawe contribuyen a crear una estética elegante así como también la iluminación, diferenciada en ambiente y estancia.
El resultado es la Terraza Jacinto Benavente, que no solo cumple con los requisitos funcionales, sino que también ofrece un refugio bello y acogedor en el corazón de la ciudad. Este proyecto muestra cómo creatividad, estética y una selección cuidadosa de materiales pueden convertir un espacio de pequeñas dimensiones en una gran terraza.